“Quizás cada generación esté escribiendo el mismo problema, volviendo a cantar el mismo cuento, pero con una pequeña y hermosa diferencia: de entonación, de voz, y basta con eso”.
Jorge Luis Borges
Así comenzaba este simpático artículo escrito por Jaime Bedoya el año 1987 sobre la generación subterránea, época del pleno boom de bandas en toda la periferia limeña. En sí se trata de una nota que deja entrever la problemática juvenil en una ciudad donde el hastío, desamor e incertidumbre por el presente reinaba en todas partes, lo cual fue reflejado en las apasionadas letras de los grupos.
El periodo coincide con la segunda generación de grupos que radicalizaron su propuesta; el informe presenta declaraciones de Ximena Santillana, corista de la banda postpunk Vox Propia; de "Kike" de la banda punk rock Eutanasia y de Rafael Hurtado, cantante de los Eructo Maldonado. También de la carismática María T-Ta, frontwoman del conjunto musical Empujón Brutal y del larguirucho César N., cantante y guitarrista de Éxodo rock n' roll.
Ante las adversidades, es bueno ver a una minoría que estaba disconforme con lo que ocurría y que gritara contra todo aquello que los jodía.
Fuente: Bedoya, Jaime. La generación subterránea. En: Caretas. 27 de abril de 1987, pp. 73-74.
